Si Chile ganaba, quedaba segundo en la tabla; si la "Roja" perdía, quedaba sexta. Pasó lo último. Tres estocadas, una de Robinho y dos de Luis Fabiano (incluso se dieron el lujo de perder un penal ejecutado por Ronaldinho), hundieron el inexistente favoritismo que rodeaba a la escuadra de Bielsa antes del partido frente a Brasil en el Nacional.Es nefasto y contraproducente, pensar que "La roja de todos" llegaba como favorita ante un disminuido Brasil. Contra los pentacampeones no podían existir equivocaciones, y Chile cometió errores en la defensa, factor determinante que condenó a los nacionales y permitieron la llegada de los brasileños al arco de bravo, creando peligro y perforando la malla en tres oportunidades; de no ser por el portero de la Real Sociedad, el marcador habría sido mucho más abultado.
El villano
Segundo partido de Marco Estrada en la selección, y se notó. El defensa no sólo tuvo un mal cometido, si no que fue el cómplice de varias jugadas de gol y el artífice del tanto de Robinho cuando el primer tiempo expiraba. Sin embargo, Bielsa le depositó la confianza necesaria y lo dejó en el segundo tiempo, con una mejoría sustancial; pero ya Chile caía por 2 goles y frente a un Brasil como los de antaño, era demasiada la diferencia.
Cuando Bielsa se dio cuenta que el equipo no funcionaba, mandó a la cancha a Valdivia, hombre que debió haber estado desde el primer minuto, debido a su talento, desplante, personalidad y conocimiento del juego brasileño, variante que le pudo haber dado un plus a la selección. En desmedro del ex jugador del Palmeiras, mandó al terreno de juego, al opaco Matías Fernández, que jugó un pésimo partido (cosa a la cual ya nos tiene acostumbrados), sin ideas, sin peligro y sin la magia que tanto destelló cuando jugaba en Colo-Colo. Cuando partió a Villareal, se esfumó ese "Matigol".
Comenzaba el segundo tiempo y Chile se iba con todo al ataque tratando de lograr el descuento que le diera esperanza para equiparar las acciones. Valdivia marcando la diferencia y Suazo tratando de interceptarla en el área, Chile comenzaba a dar luces de buen juego. Hasta el minuto 66´cuando se apagó la luz definitvamente. En una clara jugada peligrosa y sin intención de jugar con la pelota, Valdivia fue directo al tobillo de un brasileño y se ganó la tarjeta roja directa. Era el principio del fin para la "Roja" en la fría noche de Ñuñóa.
1 comentario:
simplemente increíble. Estrada perdido, cometientdo errores infantiles y soltando marcas, Valdivia, retorno y despedida y Droguett menos mal lo sacaron (y más ensima hace show). Ojalá le ganemos a Colombia, aunque queda más que claro que no hay que seguir escupiendo al cielo, poque esta vez nos cayó un aguacero en la cara
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